Sistemas ATEX
Atmosfera Explosiva
La directiva ATEX refiere a una mezcla con aire, en condiciones atmosféricas, de sustancias inflamables, el término no es aplicable cuando el riesgo de explosión proviene de sustancias inestables, como explosivos y sustancias pirotécnicas. Los equipos y sistemas ATEX deben ser garantes de la seguridad y no susceptibles a iniciar una explosión.
Esta directiva aplicada en sistemas industriales, recibe su nombre de origen Frances “ATmosphères EXplosives.”
Industrias de Aplicación:
• Industria de eliminación de residuos (gases de depuración, etc.)
• Compañías de suministro de gas (fugas)
• Industria maderera (polvos de madera)
• Talleres de esmaltado (vapores de disolventes en cabinas de lacado)
• Agricultura (biogás)
• Elaboración de metales (polvos metálicos)
• Alimentaria (polvos de cereales, azúcar, etc. en filtros)
• Energía (molienda y secado de carbones)
• Industria Química
En una perspectiva general, existe riesgo en procesos de almacenamiento, transformación, y ampliación de gases, líquidos y sólidos inflamables, dentro de los modelos productivos de las múltiples industrias.
¿Qué es una Atmósfera con riesgo de explosión?
Para que se desencadene una explosión han de coincidir 3 elementos:
1. El oxigeno del aire = Siempre presente
2. El combustible (gas, vapores, nieblas o polvos)
3. Una fuente de ignición: Aparatos / instalaciones eléctricas o cualquier fuente de calor
Para producir un explosión no son indispensables una chispa o una llama. El aumento de la temperatura superficial de un aparato puede provocar una explosión si sobrepasa el valor de la temperatura de inflamación del gas que hay en el ambiente.
Es una atmósfera constituida por una mezcla de aire, en las condiciones atmosféricas, y por sustancias inflamables en forma de gas, vapores, nieblas o polvo, en la cual, después de la inflamación, la combustión se propaga al conjunto de la mezcla no quemada. (Definición según directiva 1999/92/CE)
Es una atmósfera susceptible de explotar (el peligro existe potencialmente) como consecuencia de fallos en la instalación: fugas, roturas en canalizaciones, variaciones térmicas.
Clasificación de zonas de riesgo
Las zonas se clasifican en función de las fuentes de escape, que son puntos o localizaciones por donde la sustancia combustible puede escapar y formar una mezcla explosiva con el aire
Zona 20
Atmósfera explosiva presente frecuentemente.
Lugar en el que, durante el funcionamiento normal, el polvo combustible, en forma de nube, está presente permanente o frecuentemente en cantidad suficiente como para ser capaz de producir una concentración explosiva de polvo combustible mezclado con el aire, y/o en las que se pueden formar capas de polvo de espesor excesivo e incontrolable.
Zona 21
Formación ocasional de atmósfera explosiva.
Lugar no clasificado como zona 20 en el que, durante el funcionamiento normal, el polvo combustible en forma de nube es susceptible de aparecer en cantidad suficiente como para ser capaz de producir una concentración explosiva de polvo combustible en mezcla con el aire.
Zona 22
Formación de atmósfera explosiva en condiciones anormales, sólo breve tiempo.
Lugares en los que raramente pueden aparecer nubes de polvo y subsistir solamente durante cortos períodos, o en los que las acumulaciones o las capas de polvo combustible pueden estar presentes en condiciones anormales y pueden dar lugar a un aumento de las mezclas inflamables de polvo en el aire.